Estado de alerta por el aumento de la temperatura promedio en el ambiente, lo que genera cambios y afectaciones en las condiciones de vida de los ecosistemas y distintos sectores de la población en el estado.
La tendencia es al aumento de la temperatura, lo que indica que la evaporación de los cuerpos de agua será mayor. Aunado a esto, el riesgo de enfermedades diarréicas y por golpes de calor en la población aumenta en la medida que existe un aumento sostenido de la temperatura. Las medidas de adaptación petinentes consisten principalmente en campañas de atención a posibles riesgos a la salud, además del refuerzo de la masa forestal que permite una mejor regulación del microclima en distintas regiones del estado.